El ritual que se presenta a continuación se encuentra diseñado con el objetivo de un entendimiento más profundo de la naturaleza del tiempo, alentando en el mundo experiencias que puedan derrumbar las artificiosidades con las que uno construye habitualmente la percepción.
Nadie deja de amar a Cracky jamás. Y aquellos que no se convencen de lo contrario, quienes disfrutan en su danza demente sobre el precipicio del olvido, son la gente más peligrosa que hoy en día camina por la tierra.